Disimulas con la boca
mientras mantienes cosida
la herida que te divida,
por eso te dan por loca.
Cedes tu cuerpo a La Roca,
esa carne en donde anida
un corazón ya sin vida,
sin latido si él te toca.
La muerte tú has padecido
sin hallarte con la bala
que te una al amor perdido
Susana de suerte mala,
que mueres y no tas ido,
y vives muriendo en Comala.
Me puedes mostrar más de tus trabajos? Gracias.
ResponderEliminar